Vengo del colegio electoral. Una tomadura de pelo. Todos los candidatos eran de la misma especie de homínidos y en las papeletas no se encontraban más que nombres de personas. Me tienen aburrido. Vaya mafia. ¿Es que no dejan presentarse a las elecciones a las orquídeas, las gacelas, los gorriones? ¿Es que un elefante tiene menos derechos que nosotros? Indignante. No encuentro otra palabra. Al fin y al cabo, el resto de seres vivos maneja bastante bien sus asuntos. Llevan cuatro mil millones de años evolucionando y aportando ideas. Han desarrollado todo tipo de habilidades, estrategias y fórmulas de cooperación. Se nos deberían bajar un poco los humos.